Este es el newsletter de Ciencia del Sur, una selección de lo más importante en ciencia, periodismo científico e innovación de Paraguay y la región.
Soy Daniel Duarte, editor general de Ciencia del Sur. Cada tanto se cristalizan puntos de inflexión en la ciencia con el potencial de cambiar no solo una disciplina sino a varias transversalmente, como la edición genética por CRISPR o la inteligencia artificial generativa.
Un reportaje en la revista Science nos ofrece otro de esos momentos. Resulta que bajo la tierra puede estar la solución a nuestra dañina dependencia en los combustibles fósiles y a reducir el calentamiento global: enormes cantidades de hidrógeno en estado natural descubiertas hace pocos años.
El problema del hidrógeno como alternativa verde al petróleo siempre fue que debe ser producido: o bien se usan derivados de petróleo o bien se usa electricidad y agua (como se hará en Paraguay), un proceso costoso. Pero si podemos "minar" hidrógeno ya existente, ese problema desaparece—aunque quedan otros nada triviales, como su almacenamiento y transporte.
No obstante, según los investigadores, el hidrógeno subterráneo "tiene el potencial de reemplazar a todos los combustibles fósiles". Espectacular, pero un momento: ¿Cómo es que recién ahora detectan semejante cantidad de hidrógeno? Si toda la vida el petróleo fue extraído del mismo lugar. Aparentemente, no estaban midiendo aquello que no esperaban que estuviera allí.
Quedan muchas incógnitas aún sobre cómo se forma naturalmente y cuál es la mejor forma de extraerlo, pero ya podemos sacar una lección: a veces la solución está más cerca de lo que pensamos. ¿Qué otras maravillas podríamos estar pasando por alto? |