Cuando seguimos a nuestro equipo de fútbol favorito o acompañamos a un niño a algún partido escolar, disfrutamos del espectáculo y de verlos ganar. Sin embargo, el deporte es mucho más que victorias, derrotas o empates. Su impacto en la sociedad, la economía y la educación es potente y en muchos casos, determinante.
Edgar Romero Jara es ingeniero comercial por la Universidad Americana de Paraguay y magíster en Gestión Deportiva por la Universidad Autónoma de Barcelona y el Instituto Johan Cruyff, ambas de España, beneficiario del programa de Becas de Excelencia de Posgrado en el Exterior “Don Carlos Antonio López” (BECAL).
También fue jugador de fútbol de varios equipos nacionales. Tiene experiencia en planificación estratégica, comercial, marketing, liderazgo y coordinación de equipos de trabajo.
Romero asegura que Paraguay se encuentra en la etapa de fortalecer su industria deportiva, diversificando la gestión misma del deporte, lo que requiere personal altamente calificado. Esto mirando hacia el futuro cercano, con los eventos internacionales que tendrá el país.
-¿Cómo influyó la experiencia de estudiar en el exterior?
Tener la oportunidad de continuar mi formación en Barcelona, España, ha sido una experiencia magnífica e inolvidable. En lo académico me he destacado por ser el primer paraguayo en este programa de estudios, en ser elegido delegado de curso y finalizar la misma con excelentes calificaciones.
Esto permitió generar vínculos con la universidad para futuros proyectos y relaciones fortalecidas con compañeros de distintas partes del mundo, quienes me apoyaron y enriquecieron con sus experiencias y conocimientos, así como con su calidad de personas.
También, impulsado por el compromiso y la vocación de servir al país, he participado activamente con otros compañeros becarios en actividades sociales con la comunidad paraguaya residente en Cataluña, con el apoyo del Consulado General de Paraguay en Barcelona. He colaborado, además, con un club social creado e integrado por compatriotas cuyo objetivo es fomentar el deporte y la cultura paraguaya.
-¿Estás divulgando esto en las redes sociales?
A consecuencia de todo esto y viendo la necesidad de difundir y darle mayor realce a la capacidad que tenemos los paraguayos, nos invitaron a tomar el desafío de realizar un programa radial transmitido por Facebook Live, cuyo fin fue la de conectar con compatriotas de distintas partes del mundo a través de entrevistas virtuales, y darle un enfoque constructivo y propositivo.
Fue gratificante notar la capacidad y el nivel de compromiso de todos ellos para con la sociedad y el país; existe esperanza en los jóvenes paraguayos.
Además, estoy convencido de que el hecho de vivir en un país distinto, con todo lo que implica, me ha permitido ampliar mi óptica y tener un nuevo panorama. Esto implica desde disponer de bibliotecas totalmente completas, conocer culturas distintas, oportunidades de aprendizaje, hasta contar con medios de transporte accesibles.
Agradezco a todo el equipo BECAL por esta oportunidad.
-¿Cómo afecta el deporte a la sociedad?
El deporte ha sido desde hace siglos una herramienta de entretenimiento, un motor económico y un fenómeno social capaz de solucionar problemas de regiones enteras: desde las luchas raciales lideradas por Nelson Mandela hasta la transformación urbanística y económica de la ciudad de Barcelona luego de los Juegos Olímpicos de 1992.
Al tratarse de un área transversal, el deporte influye directamente en mayor o menor medida en distintos sectores.
Estudios han demostrado que una persona que realiza deportes es una persona más entusiasta, positiva y feliz. Esto quiere decir que ayuda en todos los aspectos psicológicos de la persona. Es por ello que el escenario para llevarlo a cabo debe ser el ideal, teniendo en cuenta el sexo, la edad, y las instalaciones para el efecto, y lo más importante, la cultura del hábito. Esto solo puede ser posible a través de la planificación integral.
-¿Cuál es tu visión sobre la situación del deporte en Paraguay en general?
La Secretaría Nacional de Deportes ha desarrollado una serie de proyectos que fomenta la práctica deportiva, que van desde juegos escolares nacionales, congresos de educación física hasta atención a atletas de alto rendimiento con resultados alentadores. Sin embargo, aún hay mucho por hacer. Las limitaciones presupuestarias y la búsqueda y captación de más profesionales en el área de gestión deportiva constituyen un reto importante.
A su vez, una gran oportunidad para seguir desarrollando la cultura del deporte en nuestro país, son los Juegos Sudamericanos ODESUR 2022 que se realizarán en Asunción y una eventual cocandidatura para el Mundial de Fútbol 2030. No se deben temer a los “elefantes blancos”. Eventos deportivos de semejante magnitud deben ir acompañados de un plan de “legado” para la posterior utilización de infraestructura deportiva y de una planificación que involucre a todos los sectores para optimizar el impacto social, económico y político que genera por naturaleza el deporte, debido a su influencia transversal.
La sinergia entre distintos estamentos públicos, así como la participación del sector privado y la ciudadanía es clave en el proceso.
-¿Cuál es la consecuencia de una política pública deportiva deficiente?
La principal consecuencia es que muchos atletas con gran talento han quedado por el camino a falta de un escenario adecuado que potencien sus cualidades físicas y psicológicas, así como la ausencia o insuficiencia de instalaciones adecuadas para el desarrollo de las mismas.
No es casualidad que los atletas de países con una mejor preparación en la gestión hayan obtenido medallas olímpicas en repetidas ocasiones y en distintas disciplinas deportivas.
No obstante, recordemos que estadísticamente, un porcentaje muy bajo de la población practica deportes de alto rendimiento, por lo que es necesario desarrollar una cultura deportiva general que se enfoque a una mayor integración social, a generar oportunidades de crecimiento personal y a una mejor calidad de vida para todos.
-¿Qué se necesita para desarrollar mejor?
Es importante contar con las instalaciones adecuadas para la práctica deportiva en todos los niveles y ubicadas en zonas geográficas estratégicas de acuerdo a los intereses y potencialidades de la ciudadanía. Esto para que sea explotada de forma óptima en cuanto a recursos y resultados, y sobre todo, hacer partícipes y responsables a los usuarios de las instalaciones, estableciendo políticas para su mantenimiento que los involucre y genere sentido de pertenencia.
Todos ayudan a crear y cuidar, un mundo que ellos ayudan a construir.
-¿El deporte puede ser un escape a la pobreza?
En otros países, grandes empresas y fundaciones internacionales utilizan el deporte como medio de disminución de la pobreza, creación de nuevas oportunidades para niños en situación de calle, desarrollo urbanístico de una región específica y desarrollo integral de personas con discapacidad, entre otros, con resultados asombrosos.
Así también, medianas y grandes corporaciones de distintos sectores utilizan el deporte como herramienta de responsabilidad social empresarial debido al impacto y al resultado que obtiene la sociedad. Un hábito que va en aumento también en nuestro país de forma paulatina.
El desarrollo de un sistema que ampare a los deportistas y al ciudadano en general y los impulse a obtener becas de estudio, u otras alternativas que permitan desarrollarlos de forma integral a través del deporte es una alternativa más que viable.
-¿En qué consistiría este sistema?
La educación y el deporte van de la mano. Este proceso debe llevarse a cabo mediante una educación deportiva adecuada.
Desarrollar una cultura deportiva desde las aulas permite obtener de forma directa niños y niñas, adolescentes y jóvenes más saludables, disminuir la tasa de delincuencia y mayores posibilidades de empleo, así como la de promover valores propios del deporte como la disciplina, el trabajo en equipo, el respeto y la motivación.
Otro reto interesante es la formación de los agentes que involucran al sector deportivo. Los atletas que culminaron su carrera activa deben contar con alternativas de formación que les permitan tecnificar los conocimientos que posee para poder transmitirlo en las aulas, en el mundo académico o en el sector empresarial.
Lo propio para las personas de otras áreas que desean incursionar en el sector deportivo es el ámbito de la gestión. Es importante mencionar que cuando nos referimos a agentes, no solo hablamos de los atletas, sino a todos los stakeholders que intervienen en el sector: autoridades públicas, líderes de empresas, medios de comunicación, educadores, etc.
-Es decir, ¿hasta un investigador puede ocuparse del deporte?
De esta manera, un ingeniero, un abogado, un arquitecto, un investigador o cualquier profesional puede y debe especializarse en el sector deportivo y trabajar en conjunto con profesionales en gestión deportiva. Ello implicará ejercer un efecto más direccionado y acorde a las exigencias de un mercado cada vez más dinámico y en expansión, obras de infraestructura, reglamentaciones legales u otro bien o servicio deportivo.
-¿En qué nivel se encuentra Paraguay actualmente en cuanto al deporte?
Nuestro país se encuentra en etapa de desarrollo en la formalización de la industria deportiva. Para ello es necesario un cambio de paradigma.
Los atletas y las instituciones vinculadas al deporte van comprendiendo la importancia de la implementación de una gestión deportiva integral para ser competitivos en cuanto a resultados económicos, sociales y por supuesto, deportivos. Así también, las marcas van tomando conciencia de las ventajas que conllevan asociarse con instituciones deportivas.
Los medios de comunicación también cumplen un rol importante en este círculo.
-¿En qué consiste la gestión deportiva?
La gestión deportiva comprende una planificación estratégica integral y participativa que diseñe objetivos SMART y proyecciones a corto, medio y largo plazo que involucre a todos los agentes que intervienen en el deporte. A diferencia de cualquier planificación convencional, la industria deportiva tiene variables adicionales, que vienen siendo determinantes: los fans y las emociones, por lo que encontrar el equilibrio entre la gestión financiera y los resultados deportivos se torna un desafío excitante.
Así también, debe comprender todos los aspectos inherentes a la institución, su identidad, sus socios si los tuviere, los objetivos estratégicos, los objetivos deportivos y sobre todo la importancia del análisis para la toma de decisiones.
-¿Qué beneficios traería esta óptica del deporte?
A nivel social permitiría una alternativa de ingreso al sistema educativo, oportunidades de formación y capacitación en el exterior, participación e inclusión social, disminución de la tasa de drogadicción y otros vicios, disminución de la tasa de obesidad infantil, una calidad de vida más saludable, entre otros.
Obviamente, esto mediante una planificación conjunta entre estamentos públicos y privados y una ejecución medible y flexible.
A nivel económico, la formalización de la industria deportiva. Esto permitirá mayores ingresos monetarios a clubes y federaciones, aumentos en la rentabilidad de empresas mediante patrocinios, mayor notoriedad ante los ojos del mundo mediante los medios de comunicación deportivos, y un escenario más atractivo para inversores extranjeros, creando un efecto multiplicador.
A nivel político una sinergia entre municipios y gobernaciones para el desarrollo de la práctica deportiva, vínculos diplomáticos con otros países y convenios con entidades educativas y deportivas y cooperación en eventos internacionales que permitirán abrir puertas, generar oportunidades, fortalecer vínculos.
–En base a tu experiencia, ¿qué diferencias notaste entre España y Paraguay?
Si bien no me gustan las comparaciones, me parece importante observar lo bueno y diseñar un método de aplicación que sea adaptable a nuestra realidad como país. El acceso a la información está muy bien desarrollado, las oportunidades para realizar estudios de cualquier tipo son más que accesibles.
Me sorprendió además ver a grandes profesionales y profesores renombrados de gran trayectoria académica en bicicleta o caminando: más de una vez aproveché para compartir sus experiencias y conocimientos. Las actividades culturales y de ocio, al alcance de cualquier ciudadano común y las “fiestas del barrio”, donde todo el vecindario se llenaba de colores y actividades para toda la familia.
Finalmente, la cultura deportiva: la gestión de instalaciones planificadas bajo criterios de alianza público-privadas que permitía optimizar los recursos y hacer partícipe a cualquier ciudadano.
Haber tenido la oportunidad de observar, recorrer y analizar organizaciones deportivas potentes, como el Barcelona FC, centros de alto rendimiento deportivo, fundaciones de deporte adaptado para personas con discapacidad y servicios educativos deportivos, así como líderes del sector empresarial-deportivo ha sido una experiencia única.
Esto me ha permitido desarrollar una visión integral del mundo del deporte, y aún queda mucho por aprender. Dimensionar el impacto que una adecuada gestión puede lograr es sin dudas un arma poderosa a utilizarla a favor del desarrollo del país.
¿Qué te pareció este artículo?
(28 votos, promedio: 2,89 de 5)
Abogado e investigador en Derecho, tiene una especialización en teoría jurídica del delito por la Universidad de Salamanca y una estancia de investigación en la Universidad de Alcalá. Masterando en Justicia Criminal en la Universidad Carlos III de Madrid.
