Hasta hace muy poco, era impensable desarrollar programas espaciales desde Paraguay, un país con aún poca inversión en Investigación y Desarrollo (0,13%, Conacyt 2015). La astronomía, la astronáutica y las ciencias espaciales en general se nos parecían muy lejanas. Y apenas teníamos algunos trabajos científicos aislados en la materia y solo accedíamos a la divulgación científica.
Y no es para menos; a diferencia de otros en la región, Paraguay no tiene tradición científica. Pero eso está cambiando, y una prueba de eso es la creación de la Agencia Espacial del Paraguay (AEP) en 2014, que comenzó a operar finalmente a partir del año pasado.
Ciencia del Sur conversó con el Cnel. Liduvino Vielman, presidente de la AEP y uno de los más acérrimos defensores del “Paraguay espacial”. El directivo de la agencia aseguró que varios proyectos están encaminados y que se pretende tener un satélite en los próximos años, quizás de comunicaciones.
La AEP fue creada por la ley Nº 5151/14 y es una entidad autárquica fundada para “entender, diseñar, proponer y ejecutar las políticas y programas en materia espacial y aeroespacial”. Depende en forma administrativa y funcional de la Presidencia de la República.
El organismo tiene como misión principal “planificar y ejecutar programas espaciales de aprovechamiento del espacio ultraterrestre, para coadyuvar al logro de los fines del Estado paraguayo”. Y como visión “ser un órgano de excelencia que brinde servicios con innovación permanente, partícipe en I+D+i en el uso del espacio ultraterrestre, para beneficios del Estado paraguayo”. Es decir, la AEP es el órgano interlocutor del Estado paraguayo en temas espaciales.
En 2017 la AEP inició con la designación de su presidente, por medio del decreto N° 6466, y se conformó totalmente con el decreto de designación de los miembros de la junta directiva en julio de 2017. La entidad cuenta con 12 miembros, representantes del ámbito público y privado.
Diversas instituciones
Lo conforman los ministerios de Defensa Nacional, Educación y Ciencias, y Relaciones Exteriores, además de la Dirección Nacional de Aeronáutica Civil, la Fuerza Aérea Paraguaya, el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología y la Comisión Nacional de Telecomunicaciones.
También forman parte de la agencia: la Secretaría Nacional de Tecnología de la Información y Comunicación, la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales, la Facultad de Ingeniería y la Facultad Politécnica de la Universidad Nacional de Asunción (UNA). Por último, la Facultad de Ciencias y Tecnología de la Universidad Católica también integra la junta directiva.
“Con la aprobación de la estructura orgánica (organigrama), con personal en carácter de comisionados de distintas instituciones del sector público (en su totalidad: seis profesionales). La AEP ya cuenta con un director de Planificación y Control de Gestión; una Dirección de Administración y Finanzas; una Dirección Jurídica y una Dirección de Educación Espacial”, resaltó el Cnel. Vielman.
La junta directiva se reúne cada 15 días en las diversas instituciones que la integran.
El verano pasado emprendió el proyecto de Escuela de Astronautas, para niños y adolescentes.
“Fue una colonia de vacaciones denominada ‘Escuela de Astronautas – en formación”, es decir se trata de una escuela en formación. Es un proyecto educativo que busca incentivar y motivar a los niños de entre 6 y 15 años al interés científico espacial, con la realización de talleres y prácticas simuladas en robótica, astronomía, astrofísica y cohetería, entre otros”, comentó el presidente de la AEP.
Para el directivo, hay que despertar el interés en los niños en las ciencias, tecnología, ingeniería, artes y matemáticas.
“Nos trazamos el objetivo de trabajar con la cualidad innata que tienen los niños de la curiosidad y las ansias que poseen por descubrir, aprender y saber cosas. Esa cualidad natural de los niños debe ser motivada y estimulada por los adultos. Queríamos concienciar a todo niño paraguayo en ser un futuro investigador en el área espacial, además de crear semilleros vocacionales en niños y adolescentes, para que en el futuro se conviertan en especialistas técnicos en el área de la ciencia, ingenieros, pilotos militares, astronautas, etc.”, destacó.
Con respecto a la fabricación y puesta en marcha del primer satélite paraguayo, Vielman manifestó que todavía falta.
“Nos falta poco y mucho, debemos ir formando recursos humanos, que una vez en condiciones ideales puedan tomar las mejores decisiones para determinar las reales necesidades del Paraguay, enfocarnos a satélites de comunicaciones u observación de la Tierra”, apuntó.
Para el directivo, la era aeroespacial y la tecnología espacial producto de las investigaciones es fundamental para cualquier país, ya que ayudaría a motivar y aumentar el número de científicos en una sociedad.
“Un satélite podría mejorar las comunicaciones, podría facilitar las planificaciones a través de las observaciones de la Tierra en sus distintas aplicaciones. La soberanía de Paraguay sobre el espacio ultraterrestre mejorará a través de un satélite nacional; se podría ahorrar divisas, como así también vender servicios satelitales e ingresar divisas al fisco”, resaltó.
“La tecnología espacial tiene gran influencia en diversos ámbitos, y especialmente guarda muy estrecha relación con las tecnologías de información como: los sistemas de comunicaciones por satélite, los de navegación por Sistema de Posicionamiento Global (GPS), observación de la Tierra, a través de sus distintas aplicaciones. La tecnología satelital es la solución para consolidar el acceso universal a las comunicaciones y observación de la Tierra”, dijo Vielman.
El presidente de la AEP sostuvo que actualmente ya se está trabajando con varias instituciones para concretar los proyectos y programas. La agencia ya tiene convenios de cooperación con el Ministerio de Educación y Ciencias, UNA, Parque Tecnológico Itaipu-Paraguay, Centro de Investigación Aeroespacial del Paraguay (CIAP), SENATICS, DINAC y Universidad Nihon Gakko. Además, hay avances con la Agencia Espacial Mexicana, el Instituto Espacial Ecuatoriano y la Comisión Nacional de Actividades Espaciales de Argentina.
La importancia de una agencia espacial
Para Vielman, como Paraguay es un país soberano y tiene derecho a hacer uso del espacio ultraterrestre, la mejor forma de trabajar es a través de una institución especializada. El tratado internacional del uso del espacio ultraterrestre, regulada por la Comisión Internacional del uso del espacio ultraterrestre, dependiente de la ONU, establece derechos y obligaciones a todos los países del mundo.
“Sabemos que la investigación científica constituye la base para todo desarrollo de la sociedad en general. Por tal motivo la AEP tiene como objetivo general: promover y gestionar el desarrollo de las actividades espaciales nacionales, promoviendo la innovación tecnológica que fuera necesaria para lograr y aprovechar el espacio ultraterrestre en forma pacífica”, indicó.
La AEP es un órgano rector de las actividades espaciales del Paraguay, y por este motivo, según el coronel, tiene como función ser interlocutor con los organismos internacionales, ya que Paraguay no debe estar distanciada de dichos avances tecnológicos.
Este año, la AEP tiene diferentes proyectos para concretar: iniciar y consolidar el segmento académico en el campo de la tecnología espacial; elaborar un plan piloto con el MEC; otorgar becas, realizar talleres, seminarios y congresos nacionales e internacionales.
También, planteará al Gobierno la política espacial y un programa nacional de actividades espaciales. Para este 2018 se proyecta el ingreso a la Comisión para Asuntos del Espacio Ultraterrestre de la ONU, la creación de un clúster de investigadores aeroespaciales y desarrollar el proyecto Paraguay al Espacio.
Sin dudas, uno de los trabajos principales que tendrá el Cnel. Vielman y demás directivos es la institucionalización y consolidación de la propia agencia.
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Equipo periodístico y científico de Ciencia del Sur
