Según el Ministro de la Secretaría Técnica de Planificación (STP), José Molinas Vega, los paraguayos consideran que es el momento de volcarnos a una economía basada en el conocimiento. Alabó el Plan Nacional de Desarrollo Paraguay 2030 (PND) y aseguró que se mejoró con el número de publicaciones de científicos paraguayos, pero que todavía falta más.
Molinas, doctor en economía por la Universidad de Massachusetts, Amherst (UMass) y fundador y exdirector del Instituto Desarrollo, es un investigador científico en el área de las ciencias sociales. Sus trabajos fueron publicados en diversas revistas de Brasil y de Estados Unidos. Obtuvo una mención de honor en el Premio Nacional de Ciencias de 1998 (ganado ese año por Isabel Zaldívar).
El ministro habló brevemente con Ciencia del Sur tras el II Encuentro de Investigadores de la Sociedad Científica del Paraguay que finalizó hace un par de semanas.
“Veo que hay un cambio en la sociedad paraguaya, que ha priorizado el proceso de transformación de una economía basada en la utilización de los recursos naturales y algunas industrias, a una economía del conocimiento. Esto es producto de una visión colectiva dentro del proceso de 13 meses de consulta del Plan Nacional del Desarrollo Paraguay 2030. Hemos acordado como sociedad realizar esa transformación”, aseguró.
Según Molinas, esa transformación ya está en marcha, principalmente con el fortalecimiento del Sistema Naciona de Investigación, específicamente con los proyectos de ProCiencia y el incentivo del PRONII del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), y con el sistema de innovación.
“En el año 2030 vamos a encontrarnos encaminados hacia una economía del conocimiento, que implica tener un mejor sistema de investigación, mejor sistema de innovación y un mejor sistema de educación superior”, puntualizó.
¿Cómo hacerlo en un país sin tradición científica?
Paraguay, a diferencia de otros países, no tiene tradición científica. Actualmente, invierte el 0,13% del PIB en Investigación y Desarrollo y es uno de los países que más dinero puso para ciencia y tecnología en pocos años. Para Molinas, la mejor forma de pujar hacia una sociedad del conocimiento es como se está haciendo actualmente.
“No tenemos tradición científica, pero estamos haciendo un buen trabajo. Desde el 2005 al 2014 se triplicó la inversión en investigación, se triplicó el número de publicaciones científicas de los paraguayos, aunque todavía nos falta mucho. Tenemos programas para mejorar la eficiencia a nuestros proyectos con los recursos escasos y queremos mejorar la coordinación interinstitucional entre el sector público, las universidades y el sector privado”, manifestó.
Recordó que el Gobierno está invirtiendo mucho dinero en el envío de paraguayos al exterior (BECAL), para que puedan formarse en las mejores universidades del mundo, Para el ministro, el programa de becas de formación en maestrías y doctorados tendrá un gran impacto en pocos años en el Paraguay.
Sostenibilidad de los programas
Según Molinas, la visión país que apunta a una sociedad y economía del conocimiento no es solo de este Gobierno, sino de toda la sociedad, ya que el Poder Ejecutivo pudo construir un espacio de consultas y articulación entre 2.000 líderes de diferentes áreas. Estos referentes, al decir del ministro, seguirán dirigiendo sus sectores, por ello existirá cierta estabilidad.
Por último, el secretario de la STP prometió que la visión del gobierno es la de seguir apostando por la ciencia, por lo que habrá más inversiones, especialmente para alcanzar las metas trazadas en el el Plan de 2030 y mejorar las prácticas educativas y científicas, que puedan elevar la calidad de la investigación y de los cursos de formación en el Paraguay.
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Equipo periodístico y científico de Ciencia del Sur
Segun las expresiones del Ministro de la STP pareciera que la visión del gobierno es extremadamente economicista, ya que en ningun momento menciona a las personas. Ojala no todo se enfoque a desarrollar la ECONOMIA del conocimiento sino que la economia sea vista como medio para lograr el fin de una mejor calidad de vida de las personas que viven en la SOCIEDAD DEL CONOCIMIENTO.