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Por ASOBECAL *

Como miembros de la Aso BECAL (becarios y exbecarios del Programa de Becas de Postgrado en el Exterior “Don Carlos Antonio López”), hemos reflexionado desde hace meses sobre lo que implica la “reinserción”. Sin duda alguna, el Programa BECAL se ha transformado en una herramienta de política necesaria para la formación de capital humano avanzado para el país.

Sin embargo, a 6 años del inicio de la iniciativa, surgen preguntas sobre el impacto real que ha tenido en el progreso del país, más allá del gran número de beneficiarios.

A fin de contextualizar, el Plan Nacional de Desarrollo: Paraguay 20301, contempla entre sus objetivos “tener a jóvenes visionarios y entrenados liderando el país”. Para que esto sea posible, hay algunas estrategias que son mencionadas, específicamente la estrategia 2.2 sobre competitividad e innovación, donde se incluye la necesidad de promover la “Investigación, desarrollo tecnológico, innovación y educación superior” a partir de varias actividades y subestrategias.

Entre ellas, se menciona el “Otorgamiento de becas a nivel de grado y posgrado en las mejores instituciones universitarias del mundo, para áreas del conocimiento y las ciencias que sean prioritariamente requeridas para el desarrollo del país”.

El Programa BECAL cumple con parte de esta estrategia, al enviar a jóvenes a las mejores universidades del mundo, con procesos selectivos que se caracterizan por su transparencia, aunque su metodología para la evaluación de postulantes, casi en su totalidad, enfatiza un enfoque cuantitativo. Sin embargo, hay ciertas cuestiones que merecen destaque para entender las dimensiones de estas becas y evaluar su impacto real.

BECAL es un programa del Fondo para la Excelencia de la Educación y la Investigación (FEEI) y tiene como objetivo “contribuir a aumentar los niveles de generación y aplicación de conocimiento de las áreas de ciencia y tecnología y en los niveles de aprendizaje en la educación a través del mejoramiento de la oferta del capital humano avanzado; además, propone el fortalecimiento de la investigación, la innovación y la educación mediante becas de estudios de entrenamiento y postgrado en el exterior”.

La iniciativa otorga becas de estudio para maestrías, doctorados y especializaciones desde el año 2015. La implementación se realiza en diferentes modalidades y convocatorias, siendo algunas autogestionadas y otras realizadas en conjunto con programas de becas como Chevening y Fulbright. A la fecha, según datos proporcionados por BECAL, fueron otorgadas 1.388 becas, con 1.092 retornados, 32 no retornados y 264 becarios.

En todas las modalidades existe la obligación, mediante un contrato firmado, de volver al país al culminar el programa de estudios y permanecer durante 5 años. Situación que se puede posponer en casos específicos, como la realización de otro programa de estudio de grado superior, el cumplimiento de funciones públicas en el exterior (misiones diplomáticas), etc.

Esta obligación de permanencia o “retorno” no implica la existencia de un programa de reinserción para los beneficiarios del programa. Cada exbecario gestiona por sus propios medios su reinserción al mundo laboral independientemente del área y tipo de programa en el que fue formado.

Aquí encontramos un primer punto de reflexión: ¿Existe un programa que identifique en qué áreas fueron formados los becarios para incentivar su vinculación laboral a lugares en los cuales sus conocimientos adquiridos podrían ser aprovechados por el país? La respuesta es no.

Por otra parte, Paraguay tampoco cuenta con una estrategia nacional de ciencia que nos permita saber qué pasos seguir para los próximos años. Esto dificulta las posibilidades de exbecarios formados en investigación de retornar, reinsertarse y retribuir al país desde sus áreas de estudio específicas.

De hecho, la reinserción fue uno de los problemas incipientes identificados en el informe de evaluación intermedia realizado al programa en el 2018. En sus páginas 41 y 42, este informe señala, entre otras cosas, que si no existen políticas de acompañamiento al esfuerzo que realiza el país a través de BECAL, la posibilidad de una reinserción laboral relevante de los exbecarios -en coherencia con las capacidades adquiridas a través de sus estudios en el exterior- se reduce de manera importante.

En línea con esta situación, vimos que es necesario entender que la reinserción y retorno no implica directamente una retribución al país de la inversión realizada.

Según los datos oficiales, ya fueron becadas en total 1.388 personas desde el 2015. (BECAL)

Reinserción en investigación y áreas prioritarias

Un ejemplo de esto es el caso de Juan (por protección hemos cambiado el nombre), veterinario de profesión, quien realizó una maestría en ciencias veterinarias centrada en virología animal y al volver al país se desempeñó como médico veterinario  en una empresa de productos agropecuarios.

Juan ya trabajaba para esa empresa antes de realizar la maestría y al volver su salario fue menor al que percibía antes de su capacitación. En otra empresa le dijeron que su CV era muy académico, y por tanto no podían contratarlo y tampoco logró insertarse en el sector público.

Recordemos que Paraguay es un país cuyo PIB depende en gran medida de la actividad ganadera, por lo que la salubridad animal es un área prioritaria. Si bien Juan pudo desarrollar docencia en universidades privadas, no consiguió trabajar en investigación o aportar al área para la cual se formó de una forma que impacte en el país. Esta experiencia ejemplifica que el aporte que un exbecario puede realizar se ve limitado debido a las actuales condiciones de reinserción.

Durante la pandemia que inició en marzo del 2020, sí tuvo la oportunidad de trabajar en el equipo del SENACSA para la detección de SARS-CoV-2, hasta que fue becado nuevamente para realizar un doctorado en España.

Caso docentes: transferencia de conocimiento

Una parte importante de exbecarios del programa son docentes que fueron a especializarse en distintos perfiles de formación responderían a necesidades identificadas en las distintas áreas (gestión educativa, orientación, didácticas específicas). Las mismas forman parte del proceso de formación continua de docentes activos2 que en su mayoría pertenecen a instituciones de gestión oficial.

En este caso, el retorno y la reinserción se encuentran asegurados, pues los docentes son beneficiados con permiso laboral durante el tiempo de formación en el extranjero. El impacto entonces no viene desde la reinserción o retorno, sino desde la transferencia de conocimientos: Los educadores que lleguen a utilizar las becas deberán luego prestar servicios profesionales en  Institutos de Formación Docente, Educación Media y Educación Escolar Básica, para formar a otros docentes a su regreso” 3.

Este punto se menciona en la carta compromiso que habían firmado los becarios al aceptar la beca, y en la ley 4842/13 en su artículo 22 de Obligaciones del Becarios en el exterior.

“El objetivo era que los docentes seamos multiplicadores del conocimiento al volver, sin embargo el MEC no contaba con un plan para nosotros. Ni siquiera podemos participar como instructores en las capacitaciones que realizan”, nos dijo una profesora becada (caso de docente a quien por protección omitimos compartir el nombre).

Al volver, el MEC no reubicó a estos docentes de acuerdo a las necesidades del sistema, no posee proyectos propios o siquiera un programa que apoye proyectos que surjan como iniciativa de los exbecarios.

El caso docente resulta más emblemático si consideramos que Paraguay cuenta con uno de los peores sistemas educativos de la región (World Economic Forum, Education Report 2016). Este no es un problema inherente solo a BECAL. Existe en general una falta de seguimiento a los programas que buscan impactar en el país. Casi siempre se trata de acciones aisladas sin ningún nexo, que terminan por disolverse en el tiempo.

Becal

Impacto real: necesitamos una mirada más profunda

Cuando debatimos sobre retorno, reinserción y retribución muchas personas cuestionan la problemática pensando que como organización pedimos que “nos regalen trabajo” lo cual dista mucho de la realidad. Entendemos que quizás muchos de los puntos que mencionamos escapan de la competencia de un programa de becas como tal y que requieren una profunda transformación de las instituciones del Estado.

Sin embargo, como receptores de una política pública y como ciudadanos paraguayos nos preocupa que no existan acciones claras sobre cómo podríamos retribuir efectivamente al tan anhelado desarrollo del país.

La alternativa de volver 5 años al Paraguay, es retornar al Estado el dinero percibido, convirtiendo al programa en un simple otorgador de préstamos para la realización de estudios. BECAL posee un instrumento en el SPI donde los becarios deben acreditar su presencia física en el país: tarea de retorno.

Como ya mencionamos, esta herramienta no monitorea el impacto del becario en su área, las tareas que se encuentra desempeñando, si sus actividades actuales están acorde al impacto que con su formación puede lograr o no. Simplemente con acreditar la presencia física en el país, incluso desempleado, esa tarea está completa.

La solución entonces no pasa solo por tener profesionales preparados en las mejores universidades del mundo, si no existen mecanismos para que este capital se integre al sistema público privado y a las instituciones educativas, generando así una retribución a la sociedad. No basta mostrar casos aislados de éxito porque hablamos de un programa público que el país necesita que tenga impacto.

Reinserción, retribución y retorno son tres conceptos que parecen similares pero sus consecuencias son sustancialmente diferentes, en especial para el Paraguay y sus objetivos de desarrollo 2030.

Desde la AsoBECAL les invitamos a leer los siguientes artículos donde profundizaremos esta reflexión y hablaremos sobre posibles soluciones que contemplen una verdadera retribución, la transferencia de conocimiento para el país y el desarrollo profesional de los exbecarios.

BECAL tiene a jóvenes del Paraguay estudiando en diferentes universidades del mundo. (Gentileza)

Referencias

1 Plan Nacional de Desarrollo Paraguay 2030 (2014). Gobierno Nacional.

2 Formación docente continua en servicio. Ministerio de Educación y Ciencias.

3 MEC capacitará a 200 docentes en universidades prestigiosas de Europa. Ministerio de Educación y Ciencias.

*La ASOBECAL se caracteriza por ser un espacio social, académico y profesional de exbecarios que contribuye activamente con una mirada técnica y científica a la sociedad y al desarrollo integral y sostenible del país. Fue creada el 19 de diciembre de 2016, bajo la iniciativa de exbecarios de la primera convocatoria del Programa BECAL, quienes comprometidos con el objetivo de dicho programa  buscaron constituir un espacio multidisciplinario de profesionales a fin de canalizar y aplicar en el país lo aprendido en el extranjero. 

La actual Comisión Directiva está liderada por Nadia Mercado, presidenta de la AsoBECAL, Marcelo Arzamendia, vicepresidente, Guadalupe Ramírez, secretaria general, Shirley Gómez, vocal, Alejandra Recalde, vocal II, Juan José Cáceres, vocal III, Claudia Ferreira, tesorera, y Pablo Fleitas, síndico.

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2 COMENTARIOS

  1. Deben ser conformados equipos de trabajos por aéreas especificas exclusivamente por ex becarios de becal, y dirigidos por director general, para ello el CONACYT debe apoyarlos…porque hasta ahora no se ha visto trabajos de investigación interesantes para el país y metodológicamente comprobados apoyados por el CONACYT..

  2. Las Universidades son los espacios naturales que deberían absorber a los formados como investigadores, el problema es que al igual que con la docencia en Paraguay hay que ser investigador taxi para poder sostenerse mínimamente, y eso en el caso de las instituciones que si prevén estos rubros que son poquísimas.

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