Lecciones del Tigo Campus Party: Innovar y emprender en versión 4.0

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Juegos electrónicos, robótica, proyectos científicos, innovación y emprendedorismo fueron las áreas que atrajeron a alrededor de 10.000 personas en el último encuentro denominado Tigo Campus Party. Una reunión global donde la colaboración se muestra como nueva tendencia para la competencia.

Del 4 al 6 de octubre pasado fue realizado en Asunción el evento que convoca a aficionados a la informática, innovación, ciencia, creatividad, emprendimiento y ocio digital del mundo entero. El Campus Party fue creado en España en 1997 y en sus inicios se realizó en distintas localidades españolas, pero a partir de 2008 emprendió una expansión internacional con eventos en Latinoamérica y Europa.

La primera edición de Campus Party se celebró en Málaga y acudieron solamente 50 personas, desde entonces su crecimiento fue tal que se han realizado 83 ediciones, en 14 países con más de 3 millones de participantes y cientos de miles de campuseros. Hoy día el evento representa un fenómeno mundial que vincula a la sociedad con las tecnologías disruptivas, el emprendedurismo y la innovación.

Sobre este encuentro, que busca ser un hito en el sistema de innovación nacional, hablamos con Germán Barreto, ingeniero en marketing por la Facultad Politécnica de la UNA, docente de la carrera de ingeniería en marketing en la Universidad Columbia del Paraguay y coordinador del Startup Lab de la Facultad Politécnica de la Universidad Nacional de Asunción (UNA). Fue uno de los disertantes del Campus Party.

El Startup Lab de la Facultad Politécnica de la UNA es un área dedicada a guiar y dar soporte a los emprendedores a través de diversos programas, eventos, oportunidades e iniciativas para la creación y desarrollo de sus startups tecnológicas.

-Germán, ¿qué opinás acerca de la organización del Campus Party? ¿Pensás que puede ser un hito para la construcción de un sistema de innovación o es sólo un evento aislado?

Me pareció una apuesta muy acertada de parte del sector privado. Y creo que esa apuesta cumplió sus expectativas con creces. El evento consiguió reunir a talentos de la tecnología, el gaming, el emprendimiento, la investigación y creatividad del país en un solo lugar durante 3 días, logrando un entusiasmo que hace un par de años no se veía.

Y consiguió que más gente conozca y empiece a interesarse en estas áreas, especialmente los más jóvenes. Creo que puede llegar a ser un hito -y no un evento aislado- en el aspecto de empezar a tomar pasos más firmes hacia un sistema nacional de innovación.

Solamente si se realizan otros eventos complementarios de forma periódica, con iniciativas particularmente desde el Gobierno y las universidades, dentro de un plan pluricelular que incluya promoción y difusión de las ciencias, la tecnología, la investigación aplicada y el emprendimiento.

Germán Barreto, coordinador del Startup Lab de la UNA, durante su participación en Tigo Campus Party. (Gentileza)

-¿Qué actividades desarrollaron desde el Startup Lab en el Campus Party?

Desde Startup Lab participamos de un panel sobre el ecosistema emprendedor, junto a referentes como Fernando Espínola y Yonita Muñoz. Hemos comentado nuestro parecer sobre el estado de madurez de dicho ecosistema, así también como las falencias y aspectos a mejorar desde nuestra óptica. También tuve la oportunidad de dar un taller sobre validación temprana para emprendimientos tipo startup.

-¿El esquema puede ser reproducido en la UNA a fin de generar un micro-ambiente de innovación?

El esquema debe ser reproducido dentro de la universidad. Si queremos empezar a ser más productivos en la academia, debemos empezar a crear eventos y espacios sostenibles donde se reúna todo el talento de las diversas áreas de estudio, que hay muchísimo.

Si miran atentamente el evento Campus Party podrán ver que mucho talento presente pertenece a la academia. Deben participar y conocerse para propiciar una «polinización cruzada» que permita la generación de mayores y mejores investigaciones, productos y soluciones para la sociedad y el mercado.

Creo que dentro de la universidad, debemos empezar a cambiar el mindset y adoptar el «Collaboration is the new competition»: la colaboración es la nueva forma de competir.

-En el Campus Party vimos una dinámica muy interesante entre divulgación científica, exposiciones y talleres de robótica, seminarios de industria 4.0, tecnologías exponenciales, transferencia tecnológica, criptomonedas, entre otros temas de actualidad. ¿Qué debemos hacer para que estos temas se incorporen al día a día de nuestra sociedad y sean parte de nuestra cultura?

Y, nuevamente, empezar a replicar estos eventos. Cosa que sucede pero con poco apoyo aún en algunas áreas de las citadas. Me parece importante rever también la forma en que comunicamos nuestras iniciativas, no temer a hacer una mejor comunicación de lo que hacemos.

-A nivel de autoridades y de Gobierno, ¿cómo hacer para que existan políticas y planes de innovación que estimulen la creatividad y la innovación en nuestro país?

A nivel Gobierno, me parece importantísimo empezar a redactar planes hacia el trabajo de una verdadera gestión de la productividad derivada del conocimiento, que permita pensar seriamente en modelos económicos más complejos. Pero, para lograr eso lo primero que se debe hacer es tomar seriamente la educación, en todos los niveles e incorporar fuertemente el enfoque STEM.

Esto permitirá que más adelante tengamos  una masa crítica de jóvenes con verdadero talento en las ciencias, las ingenierías, las matemáticas y en la programación, porque serán ellos los constructores de soluciones con verdadero mayor valor agregado para esa nueva matriz económica nacional.

-¿Qué reflexión te deja un evento de esta naturaleza realizado en nuestro país?

Me deja entusiasmado. Creo que si logramos difundir mejor estas iniciativas y replicarlas desde nuestro lugar de desenvolvimiento, de forma periódica y sostenible, atraeremos más gente, nuevas personas, jóvenes que empiecen a interesarse y quieran formarse en estas áreas, que en muchas la oferta es aún deficitaria y la productividad baja.

Más de 10.000 personas participaron de Campus Party Paraguay, un evento que desde el aspecto «marketero» se puede considerar de nicho, para un país como Paraguay, 10.000 personas yendo a un evento de ciencia, tecnología, innovación y emprendimiento es bastante alentador, y es una señal de avance.

Tigo Campus Party reunió a expertos y aficionados en ciencia, tecnología e innovación. (Tigo)

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Columnista de Ciencia del Sur. Bioquímico por la Facultad de Ciencias Químicas de la Universidad Nacional de Asunción, UNA. Del 2004 hasta la fecha trabaja en el desarrollo y gestión de la investigación, innovación y transferencia tecnológica en la Universidad Nacional de Asunción. Recibió una mención de honor como divulgador por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología en 2017. Es el vicedirector de Ciencia del Sur.

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4 COMENTARIOS

    • Muchas gracias, Fátima. Es verdad, debemos apostar por mayores espacios y oportunidades para la ciencia, el arte y el emprendedurismo.

  1. Por todo lo que he leído, me parece que fue un acontecimiento por todo lo alto. Sería importante la continuidad de este tipo de actividades por las posibilidades que trae una economía basado en las ciencias. Mostrar a la sociedad que la transmisión de conocimiento genera desarrollo económico, sería valioso.

    • Así es, fue un excelente evento y creo que ya está asegurada la realización por uno años más. En cuanto a lo otro, efectivamente deberíamos apuntar a una sociedad del conocimiento, la creatividad y la innovación.

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